El panorama político de Estados Unidos de cara al 2025
A mediados de este año el presidente Joe Biden dio a conocer una orden ejecutiva por la cual el gobierno anunció la restricción de entrada de migrantes indocumentados a suelo estadounidense, así como la obtención de un asilo.
Esto, según Biden, en un intento por tomar nuevamente el control de la frontera sur del país y de restablecer la seguridad en la zona que durante los últimos años ha estado desbordada de cientos de miles de migrantes intentando cruzar.
Estas medidas implican además que el cruce ilegal por la frontera sur no permiten a estos migrantes solicitar asilo y así mismo ayudaron a acelerar aun más las deportaciones masivas.
«El anuncio que se está haciendo hoy incluye una serie de medidas que aumentan significativamente las consecuencias para las personas que cruzan nuestra frontera sur de manera ilegal», indicó Núñez-Neto, subsecretario de Política Fronteriza e Inmigración.
Las medidas mencionadas establecieron que las personas que crucen de manera ilegal la frontera entre Estados Unidos y México no serán aplicables para solicitar asilo. Esto tiene varias excepciones como por ejemplo niños que viajan solos, victimas de trata de blancas o personas que requieren de urgencia asistencia médica.
Las personas que hayan sido detenidas intentando cruzar de esta manera serán deportadas de manera automática.
Esto ha permitido que México juegue un papel fundamental y su nueva presidenta Claudia Sheinbaum mantenga lazos fuertes con el presidente electo Trump. Para ello, el presidente estadounidense necesitará asegurarse que México pueda seguir recibiendo deportados mexicanos, así como de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela.
El panorama político es claro: durante el gobierno de Biden se trató de manejar la situación de una manera mas diplomática y quitando incentivos para frenar la migración. Ahora, con Trump la cosa será diferente y se comenzarán a aplicar políticas de mano dura e incluso violentas que incluirán uso de la fuerza por parte de la policía, militarización y ampliación del muro con México.
Esto en cuanto a los migrantes que intentan cruzar. Pero ¿sobre los que ya están en Estados Unidos qué? Bueno, aquí la pregunta no es el qué sino el cuándo.
El cierre de albergues indica un movimiento estratégico dentro de las ciudades santuario que, aunque las asociaciones defensoras de los derechos de los migrantes quieran jurídicamente y con un buffet bastante amplio de abogados, alegar injusticias humanitarias, el panorama dice que es mejor salir del país que vivir allí irregularmente.
Publicar comentario